VÍA VERDE LUCAINENA DE LAS TORRES
Ficha técnica
Lugar de Salida | Estación de Lucainena de las Torres (vía verde) |
Localidad | Lucainena de las Torres |
Distancia | 15.400 Km |
Dificultad | Fácil |
Terreno | Tierra |
Tipo de ruta | Lineal |
Track | Descargar |
Descripción de la actividad
Desnivel Positivo: 11 m
Desnivel Negativo: 297 m
Desnivel neto: 290 m
Altitud Máxima: 544 msnm
Altitud Mínima: 254 msnm
Tiempo: 1h
La vía Verde de Lucainena arranca en la antigua estación de ferrocarril, hoy rehabilitada en escuela. Es fácil de localizar, pues será el primer edificio que nos saldrá al paso al entrar en el bonito casco urbano de Lucainena desde la carretera A 370.
Comenzamos el recorrido con unas panorámicas por estrenar: a la izquierda se abre una amplia depresión árida, a la derecha se levanta de forma impetuosa sierra Alhamilla, atrás queda la estampa del rocoso peñón de Lucainena sobre el caserío y por delante nos espera toda una aventura siempre en ligero descenso.
La vía avanza por el somontano que, con suavidad, cae desde la sierra a una rambla que no vemos todavía. En este espacio se reparten cortijadas añejas y pequeñas parcelas de almendros y, principalmente, olivos. Así, llegaremos a la primera trinchera ferroviaria, en curva y con interesantes paredes terrosas de colores muy vivos. Sin duda, una buena clase de geología mientras se recorre esta vía verde.
A partir de aquí la plataforma se convierte en un balcón a la rambla de Lucainena. Veremos como el trayecto se enriquece con las sucesivas barranqueras que, cuajadas de higueras, adelfas, escobones y frutales, se precipitan vertiginosamente hacia la rambla.
En el Km 3,3 el camino nos conduce al cortijo la Guitarra. Poco más adelante, a la altura de un obsoleto acueducto, comprobaremos como los picachos de la sierra de Alhamilla menguan a montes romos que reducen su empuje.
A continuación la vía traza un curvado terraplén, atraviesa terrazas de olivos y se adentra en una segunda trinchera alta y curvada. A la salida de esta trinchera (km 4,4) los montes se alejan y ceden el protagonismo a la rambla. El curso seco se abarranca y retuerce, queda aprisionado entre altas paredes terrosas y coloristas.
A la altura de El Saltador, km 4,8 hay un mirador con una zona de descanso para observar entre otras cosas las ruinas de la antigua noria que se observa en frente de nosotros rodeados de palmeras, Cortijo de las Tejas. Lugar con mucho encanto. Desde este punto la vía verde es compartida con la carretera que nos lleva a la barriada de Polopos, durante este trayecto se atraviesan por varios túneles excavados en la roca hasta llegar al Puente del Molinillo (km 10,300)
Aquí dejamos la carretera compartida y nos desviamos hacia La venta del pobre entre despártales y algún que otro invernadero.